La cantante y compositora peruana Ann Dreyfuz acaba de lanzar Lindos colores, su nuevo single que ya se puede escuchar en todas las plataformas. La canción mezcla hyperpop, industrial y electrónica para hablar de algo que nos afecta a todos: cómo seguimos atrapados en un sistema que daña el planeta, aunque quisiéramos hacer las cosas diferente. El single también incluye una segunda versión, mucho más íntima y nostálgica. Escucha “Lindos Colores” de Ann Dreyfus, aquí.

“El mundo está lleno de contradicciones”, cuenta Ann. “Sabemos que los productos que usamos o comemos muchas veces tienen un costo ambiental y social enorme, pero cambiar esos hábitos es más complicado de lo que parece. Por eso quería poner esa incomodidad en una canción”.

Lindos colores se mueve en un sonido cargado de energía, donde los elementos electrónicos y los toques industriales se mezclan para crear una atmósfera artificial, que refleja el mundo mecanizado en el que vivimos. Entre las influencias de este tema están bandas como Skinny Puppy. La versión slow nació gracias a una adaptación para conciertos en vivo junto al guitarrista Ale Vilela, que le dio a la canción un tono más pausado y melancólico.

La producción del single estuvo a cargo de @carla.gg.wav, con mezcla de @s.bismarck y dirección vocal de @bruno.vocalcoach. Las voces fueron grabadas junto a @_melissacabrera, mientras que el concepto visual lo desarrollaron @robertocarlos.foto en fotografía, @dianadavilafotografia en retoque y @dianapereirar_ en diseño. Además, el videoclip de la versión slow, dirigido por @dondiegx, ya está disponible en YouTube.



Este single es solo el segundo vistazo al álbum debut de Ann Dreyfuz, que llegará en septiembre. El disco girará en torno a la idea del amor en medio de la crisis, combinando canciones románticas con reflexiones sobre los problemas sociales y ambientales que marcan la vida actual.

Para Ann, Lindos colores es más que una canción. “El primer paso para salir de algo tóxico es poder hablar de ello”, dice. “Si con esta canción alguien se cuestiona sus propios hábitos de consumo, ya es un avance. No se trata de cambiar el mundo de golpe, pero sí de empezar a mirarlo distinto”.