De las entrañas del punk rock con Terreviento al cosmos de la electrónica, Kachete ha emprendido un viaje sonoro lleno de matices y transgresión. Su nuevo sencillo, “Sonidos Cósmicos”, encapsula este trayecto, marcando una clara evolución desde los acordes agresivos que lo caracterizaban hacia paisajes más introspectivos. Este cambio no es fortuito, sino el reflejo de una necesidad de equilibrio entre lo visceral y lo emocional.

En “Sonidos Cósmicos”, Kachete utiliza la música electrónica para construir un espacio de introspección y autodescubrimiento. Los sintetizadores ondulantes y los ritmos envolventes se contraponen a los gritos rabiosos de su etapa punk, generando una atmósfera donde lo contemplativo cobra protagonismo. La electrónica no solo es un medio, sino un lenguaje que le permite expandir su creatividad sin ataduras.

El contraste entre su pasado y su presente artístico es palpable, pero también armonioso. En lugar de rechazar sus raíces, Kachete las abraza y las reinterpreta. Las intensas emociones del punk encuentran un nuevo cauce en la electrónica, generando una expresión musical que equilibra fuerza y sensibilidad.

La producción de Jack Bastante juega un papel crucial en este proceso. Desde Boston, Bastante supo captar la esencia dual de Kachete, integrando elementos de ambos mundos en una sola composición. El resultado es una canción que equilibra lo orgánico con lo sintético, lo emocional con lo racional.

“Sonidos Cósmicos” no solo representa una transición sonora, sino también una declaración de intenciones. Con este sencillo, Kachete demuestra que el arte no tiene que estar confinado a categorías estáticas. Su evolución es una invitación a explorar nuevos territorios, sin miedo a perderse en ellos.